martes, 11 de septiembre de 2007

La OMAG comunica

A quienes corresponda, de nuestra mayor consideración.

Esta Organización rechaza enérgicamente las distintas alusiones (o acusaciones) que se le realizan en una nota publicada en el día de la fecha en el matutino “Olé”, firmada por el periodista Julián Mozo, titulada “¡Alerta, clásico!”.

En la misma, se insinúa que las acciones que lleva a cabo el Departamento de Operativos de la OMAG darían crédito a las distintas agresiones que han sufrido algunos de los integrantes del clásico marplatense en los últimos tiempos. Frases como “Una organización le hace la vida imposible con cargadas de todo tipo. Algunos traspasan los límites”, y “¿Hasta qué punto es folclore y en qué punto empieza a ser ofensivo e invasivo?”, por ejemplo, ponen en tela de juicio la forma de actuar del mencionado Departamento. Hasta inclusive pueden llegar a confundir y dejar dudas respecto del real sentido de las ideas.

Nada más lejano de la realidad.

El espíritu y la práctica de la Organización siempre han sido con fines no violentos y firmes avaladores del humor en sí mismo, sin consecuencias mayores. Para dar muestra de ello, y por si hiciera falta, se repasa a continuación uno de los párrafos del Acta de Fundación:
“La OMAG no quiere herir la susceptibilidad de ninguna persona de bien. Sólo busca expresar la esencia milrayitas de un modo claro y contundente, defendiéndola de los ataques injustos que no cesan de dirigírsele por las vías más diversas. Sin violencia y con respeto. Valiéndose del arma más limpia con la que cuenta el Hombre Inteligente: el humor. Riéndose con, y no de, las víctimas circunstanciales de sus afiches, sus operativos, y sus opiniones”.

De más está decir que se espera una rectificación de parte de quienes NO ENTIENDEN EL MENSAJE, porque además son los que, distorsionándolo, hacen que las diferentes formas de accionar de la Organización sí parezcan agresivas y violentas.


Junta Directiva OMAG